LIBROS, FLORES… y “Dos Mundos”

Hoy, 23 de abril, se celebra en Cataluña, ese “país” tan particular decorado por Gaudí, el día de “Sant Jordi” o lo que ha originado “El día internacional del libro”. La verdad que tiene una historia bonita este día, y no me refiero a que la UNESCO haya declarado el 23 de abril como  el día del libro, sino a la historia catalana de Sant Jordi.

Cuenta la historia que, desde la época medieval, es tradicional que el día de Sant Jordi o San Jorge los hombres den rosas a sus amantes, y desde 1925 que las mujeres  les den un libro a cambio. Ainnssss  que origen más bonito, con rosas y libros, no me dirán que no es romántico y cultural a la vez…no puedo pensar en una fórmula mejor.

Y bueno, el resto de España, y por añadidura el resto del mundo, y no sólo el hispánico, celebra el  “Día Internacional del libro” o “Del Idioma”  que es como se le conoce también en Latinoamérica.  

La UNESCO declaró tal acontecimiento como digno  de ser celebrado, con lo que estamos más que de acuerdo, en 1996. La elección de la fecha se debe a esa leyenda que ubica la muerte de tres grandes de la literatura el mismo día… y año para más inverosimilitud. Como diría el vulgo,“a según”, Miguel de Cervantes, William Shakespeare y El Inca Garcilazo de la Vega, murieron ese mismo día el año 1616. Ya se sabe que no fue así, pues la muerte del Cervantes es según el calendario gregoriano y la de Shakespeare según el juliano, pero aunque así sea, es anecdótico y bien particular.

Para celebrar este día, ya que no puedo estar en Cataluña, donde la fiesta es a lo grande y las rosas son más populares que en San Valentín (faltaba más para eso los catalanes tiene sus propios días), lo celebraré en Madrid en algo maravilloso que se llama “La noche de los libros”, cuando las librerías abren toda la noche y se pueden comprar libros con 10% de descuento, maravilloso no?.

Hoy, recuerdo como celebrara en mi querida Caracas, “El día del idioma”. Como profesoras de Castellano y Literatura, mis compañeras y yo, organizábamos en los colegios o en la universidad jornadas especiales para honrar a Cervantes, a Shakespeare y a Garcilazo. La verdad echo de menos esos días de enseñanza y  de compartir con los alumnos el amor por los libros y las letras. Pero hoy y gracias a “otro mundo” lo celebro con rosas y libros. Si es que lo digo siempre, soy muy afortunada de haber vivido y vivir lo mejor de “Dos Mundos”.